4 de abril de 2010

DOLORES DEL RIO






PRIMERA PARTE
Su nombre completo fue Dolores Asúnsolo López Negrete, nacida en la ciudad de Durango, México en 1905, ciudad donde proliferaban como símbolo de riqueza las mansiones a la europea, que componían el centro y una buena parte de sus calles principales, todas lujosas de dos o tres pisos y de cantera, habitadas por familias porfirianas, poderosas y aristocráticas, entre estas familias se encontraba la formada por Jesús Leonardo Asúnsolo y Antonia López Negrete y López..



 En su infancia fué criada como una princesa y  su madre, doña Antonia  estaba tan orgullosa de su origen aristocrático que viajaba a todas partes con un enorme legajo en el que conservaba documentos notariados que certificaban la nobleza de su linaje familiar, el cual se remontaba a la España anterior al virreinato, la  familia perdería su gran fortuna durante la Revolución mexicana.Debido a la pérdida de su fortuna,  la familia parte a la ciudad de México, la chatita, como cariñosamente la llamaban de niña, entra a estudiar al colegío Francés para  niñas, a cargo de las monjas francesas del convento de San José, ubicado en la rivera de San Cosme,  desde muy pequeña Dolores además de ser una niña inteligente y aplicada demostró aptitudes para la danza, arte que la daría a conocer entre el selecto grupo social en el que se desenvolvía. Por cierto eran familiares del presidente Francisco I. Madero, tío de Dolores, de quíen eran vecinos, pues las familias vivían en la calle de Berlín,  Dolores recoraba que su tío el señor presidente de México, le había regalado un globo rojo y la había sentado en sus rodillas.
"Con un beso el presidente de México me dio el globo rojo más bello que jamás niña alguna haya poseído, Don Francisco I. Madero dejo en mi frente un beso inolvidable. Yo le ví a los ojos y recuerdo con mucha precisión la tierna luz que había en ellos, aquellos que suelen tener los que aman la paz, la justicia y la belleza"


Para Dolores asistir al cinematográfo era un acontecimiento mágico, pero en 1919, su madre la llevó a ver a la bailarina clásica rusa Ana Pavlova, su interpretación de "La muerte del cisne", le hace nacer en lo más profundo de su ser la necesidad de ser bailarina, con el tiempo forma parte de la escuela de danza de la célebre maestra Felipa López, las clases de danza acentuarían en Lolita su gracia y elegancia, que en forma natural ya poseía.

A principios de 1921, un grupo de damas de la alta sociedad mexicana organizaban una función de caridad a beneficio de un hospital y como parte de la variedad necesitaban una muchacha que bailara danza española, así que una de las organizadoras conociendo el excelente desempeño de Lolita habla con doña Antonia, para que le permita a su hija participar en el evento, cosa que no fue tan fácil, ya que la madre de la chatita no le parecía del todo bien, pero al consultarlo con las monjas y dar estas su aprobación, todo marcho sobre ruedas, así la joven Dolores conoció a Jaime Martínez del Río y Viñet, quíen era el principal coordinar del espectáculo, que era un refinado y culto aristócrata que se había educado en Inglaterra y había pasado la mayor parte de sus 34 años en Europa, este caballero es el primero que le dá un trato a Dolores como una mujer y no una niña, entre ensayo y ensayo le contaba sobre sus viajes, hablabán de ópera, ballet, pintura, de cine, situación que aunada a su forma tan especial de tratarla lograron fascinar a Lolita.

Después de la presentación que fue muy exitosa, regreso a su vida normal, pero seguía en relación con Jaime, quíen comenzó a cortejarla, finalmente le declaró sus sentimientos y al ser aceptado habló con los padres de Lolita, quienes vieron con agrado el romance pues este solterón era considerado uno de los mejores partidos de la época. así que  contrajo nupcias tan solo dos meses después de conocerse , la boda fue todo un acontecimiento y se realizó el 11 de abril de 1921, a la que asistío toda la aristocracia y la alta sociedad del porfirismo.
Su luna de miel fue en Europa y duró dos años, regresando a México en 1924.
A su regreso a México don Jaime se dedica a sus extensiones algodoneras, en las que finca sus esperanzas de ganar millones de pesos, desafortunadamente para ambos hubo una gran sequía, e incluso don Jaime estuvo a punto de ser asesinado, la pérdida fue casi total, en este tiempo Dolores estaba embarazada, pero el embarazo se interrumpió antes de tiempo con riesgo de muerte para Lolita, el médico le informa que no debe embarazarse ya que su vida depende de ello.

Su vida social aunque disminuida continuaba y en ocasiones le pedían a Dolores que bailara, en aquel tiempo Adolfo Best Maugard, uno de sus mejores amigos dio una fiesta en la que los principales invitados eran dos matrimonios norteamericanos, uno de ellos era el formado por  Edwin Carewe (un productor de Hollywood) y Mary Atkins, la belleza y gracia de Dolores al interpretar la música de Falla y de Albéñiz cautivaron a Carewe quien en plena luna de mil, se enamoró perdídamente de ella, Dolores recibe al siguiente día un enorme ramo de flores a nombre de Carewe y su esposa, dos días después por medio de la intercención de Best asisten a la casa de los Martínez del Río para tomar el té y en su plática en forma por demás eufórica les propone que Dolores entre al cine, en la misma meca de Hollywood, así que lo piensan un tiempo y finalmente después de valorar muchas cosas y de consultarlo con su señora madre, quíen consideró buena la idea, idependientemente del escándalo que dicha decisión podría causar en la clase social a la que pertenecían, la misma opinión fue la de don Jesús, su hija, su chatita debía intentar hacer carrera de actriz en Hollywood, la oposición vino por parte de la familia de Jaime, la cual incluso llamó en su apoyo a muchas familias aristócratas, por lo que de la noche a la mañana el matrimonio que aún no tomaba su decisión eran hechos pedazos por la crema y nata mexicana. 
Eduardo Iturbe, una persona extremadamente influyente en la sociedad mexicana le dijo a Dolores, , la fiesta fue un gran éxito, la gente se peleaba por las invitaciones, al finalizar el baile el señor Iturbe le dijo apenas con tiempo de hacer las maletas y tomar el tren  finalmente parten  a los Estados Unidos, en un viaje que duraría cinco días para llegar a los Angeles.
"no titubees, tu decisión es magnífica, te voy a organizar un gran baile de despedida y a él vendrá las más grandes figuras de la sociedad"


"Ahora a ver quién se atreve de cerrarte las puertas de su casa" 




El 26 de agosto de 1925 llegaron a los Angeles, Dolores del Río acababa de cumplir los 21 años, donde Lolita inicia su carrera  al participar en el reparto de la película "Joanna".
Un día de noviembre, Carewe le avisó que Joanna se estrenaría pronto en una premier, a la que Dolores asistío acompañada de su esposo, padres y varios amigos que habían venido a verla desde México, terrible fue su sorpresa al ver que su crédito decía Dorothy del Río y que ella apenas aparecía, había hecho lo que se denomina un bit. así el principio no fue nada fácil, lleno de presiones, de preparación, de horas de gimnasia, idioma, en fin todo lo que Carawe consideraba era necesario para construir una estrella, de hecho la pregunta directa fue la siguiente  
"Estas dispuesta a sacrificar en todo y por todo en aras del estrellato"
Ella aceptó y se entregó por completo a la creación de una estrella llamada Dolores del Río.

Edwin Carewe, descubridor de Dolores del Río

A pesar de que sus primeras películas en Hollywood no son un éxito, Carewe realiza una extensiva campaña para promocionar su carrera, con el objetivo de convertirla en la versión femenina de Rodolfo Valentino.
"Pals first" es la primer película donde es la estrella principal, Lolita seduce y encanta a la audiencia, sobre todo al público masculino, que en una encuensta manifestó deseaba saber más de esta nueva presencia, así que la situación fue aprovechada por la First Nacional que distribuye una foto de Dolores con una peineta, con las fotos de seis estrellas masculinas y en el centro una interrogación haciendo alusíon al verdadero amor de la actriz, situación que molesto a su esposo, que se opuso sin éxito a esta campaña.



Poco después llega su  participación en el filme "El precio de la gloria" (1926), de Raoul Walsh, quién era un enamorado de México, pues había vivido durante su juventud en ese país, conseguirá darle el anhelado reconocimientoque marca el inicio de la inmensa fama y gran renobre que logra en el cine silente de Hollywood, su belleza y su encanto la dejan ya inscrita en la historia del cine para siempre.
 

Su debut  inicio  al lado de figuras como Rodolfo Valentino, Lupe Vélez, Douglas Fairbanks, Marlene Dietrich, Ramón Novarro, Mary Pickford, Charlie Chaplin, Pola Negri, Laurel y Hardy, entre otros más.

Es declarada ganadora del premio "WAMPA'S (Western Association of Motion Picture Advertisers) Baby Stars" en 1926.


Lupe Vélez y Dolores del Río





 






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